En Iroko Crianza se puede degustar una de las combinaciones varietales históricas de Rioja, el de Tempranillo y Graciano. Cuando la naturaleza inspira la fuerza del viñedo y el clima, la tierra de la Rioja ve como los factores de la naturaleza se alían para inspirar una maduración cuidadosa de 12 meses en barricas de roble americano que consiguen expresar una excelente frescura y elegancia. Disfrute de cómo ambas se armonizan proporcionando un vino de gran finura, personalidad y potencia.

Una gran relación calidad precio,un verdadero placer para los sentidos.